Ricky, Mike, Sam, Andry y Matías salían para ir al pueblo de Elisabeth. Era la una de la madrugada del sábado.
Se encontraron con Elisabeth por el bosque.
- Hola Elisabeth –la saludó Ricky con una sonrisa en su rostro.
- Hola niños, por fin llegasteis, creí que os habríais perdido.
- Nosotros nunca, somos muy buenos –después de decir esto Elisabeth se rió.
- ¿Dónde vamos a vivir? –dijo Andry.
- Pues en mi casa.
- ¿Y a qué esperas para enseñárnosla?
- Vale, seguirme, pero tened cuidado de que no os vea nadie.
- ¿Por qué? –preguntó Sam.
- Luego os lo explicaré cuando lleguemos a mi casa… seguirme.
Elisabeth salió corriendo dando un rodeo por el bosque, para que así los lobos no los olieran. Llegaron a un prado, muy apartado del pueblo. Allí había una casa grande de color blanco. La parte que daba al bosque oscuro era entera de cristal, y en la otra había ventanas pintadas de negro para que no pasase la luz.
Elisabeth los condujo al interior de la casa, y les enseño las habitaciones que iban a tener para hacer lo que quisieran. La habitación de Elisabeth era la más grande, y a diferencia de las demás, tenía la pared de color rosa claro, y el techo y el suelo eran de color blanco. En ninguna de las habitaciones tenia cama, pero si tenía un sofá enorme en medio, televisión de plasma y un equipo de música en cada una de ellas.
Elisabeth los dejó para que ordenaran las ropas y el armario, mientras se fue a dar una vuelta haber que planeaba Raven.
Fue a la casa de Raven y esta la recibió muy contenta.
- ¿Qué tal Elisabeth? ¿Ya han llegado los demás vampiros?
- Si, ahora mismo están en mi casa colocándose.
- Me los tienes que presentar, ya que se el secreto, no estaría mal, jejej.
- Claro, cuando quieras te pasas por mi casa y te los presento.
- ¿Qué vais a hacer con los lobos?
- Muy fácil, no se van a enterar.
- ¿Y eso como?
- No vamos a salir de mi casa, bueno… al menos ellos.
- ¿Y para cazar? –Elisabeth se quedó pensando.
- Pues si… si nos pillan tendremos que pelear, no hay otra solución.
- No les echaremos de menos –Raven empezó a reír.
- Si… claro… -Elisabeth se quedó mirando a Raven con cara pensativa, porque lo que esta no sabía era que Nessie también era loba…
- Me voy… tengo hambre y quiero comer antes de que salga el sol, ya me entiendes, jejej
- Claro, jejej, y ¿dónde vas a ir hoy?
- No lo tengo claro… me parece que voy a probar con el pueblo de al lado… los lobos están empezando a sospechar de mí.
- Bueno, vale, te dejo, adiós.
- Adiós Elisabeth.
Elisabeth se fue a su casa y estaban todos reunidos en la cocina, que la tenía de pega, la estaban esperando.
- Ya estamos en tu casa… explícate –dijo Sam.
- ¿Tiene que ser ahora?
- Luego será demasiado tarde.
- Bueno… pues que no somos bien recibidos aquí.
- ¿Por qué? ¿La gente sospecha?
- No… es peor.
- ¿El qué?
- Licántropos.
- ¿Licántropos?
- Si… aquí hay licántropos, si nos pillan nos pueden matar.
- ¿Cómo nos alimentaremos si no podemos salir de aquí?
- No lo se… nos alimentaremos de animales, y lo haremos sin que ellos se den cuenta, ellos no saben que estáis aquí.
- El domingo saldremos.
- Ya, pero iréis vosotros solos, yo buscare a los chuchos y los entretendré para que vosotros podáis cazar a gusto.
- Vale.
- Ir en cuanto salga el sol, por la mañana, a esa hora no suele haber mucha gente por el bosque.
- Claro, iremos a descansar a nuestras habitaciones… no saldremos hasta el domingo, así que el domingo nos avisas cuando tengamos que salir.
- Vale… hasta el domingo niños.
Cada uno se fue a su habitación y Elisabeth se quedó en la cocina pensando como entretener a los lobos el domingo, iba a necesitar la ayuda de su mejor amiga, Raven Evans.
como planea entretener a los lobooos??
ResponderEliminarni idea jajajaja
ResponderEliminarxk en realidad al ginal no los entretiene xk no los encuentra jajaja
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